¿Quién no ha soñado con un blog en donde puedas plasmar todas tus aventuras? Depende al usuario que quieras llegar ese blog tendrá su tono y forma de ser escrito.
Puedes escribir sobre las aventuras de una isla paradisiaca, sobre esas sensaciones de cuando caminabas por la arena de noche y el agua era tibia. Cuentas cómo se veía desde ahí el carnaval en plena playa.
Todos los tambores, la gente bailando al al ritmo de las olas y las nubes tapando la luna menguante de un tono amarillo tenue. Todas tus aventuras inolvidables teñirlas en un blog, con el fin de que puedan ir a experimentar sus propias emociones, además de lograr que sigan leyéndote.
También, puedes optar por ser como Virgina Wolf y escribir un ensayo literario sobre su “Paseo por Londres”, que también es considerada como literatura de viajes. Tener una conversación con el usuario mientras narra sobre Londres o ir describiendo la ciudad, con el fin de que con esos argumentos tratas convencer al lector de algo.
Otra forma podría ser a lo NatGeo, en modo más de investigación, que puede ser interesante colocando fuentes, infografías, videos, o cosas más visuales que ayuden a esclarecer el contenido.
De todas maneras, como decidas que va a ser tu blog debes siempre tener claro cómo vas a llegar a tus usuarios o cómo te van a encontrar.
Si eres principiante, sería ideal tener tu propio sitio web y/o una red social que te potencie. Eso le dará visibilidad y podrán conocer más de tu trabajo.
Si ya te manejas con lo anterior, debes hacer una estrategia SEO que te ayude aparecer entre los motores de búsquedas, a pesar de que siempre es aconsejable hacer el sitio web con todas las recomendaciones SEO.
Intenta que tus blog tenga datos estructurados, que tenga carruseles de fotos, que tengan insertos videos y las opciones de comentarios.
Los comentarios son muy útiles para los blogs de cocinas, para que las personas dejen sus dudas como, también, para uno de viajes.